Daniel Romano. Otro

"Como el río de Heráclito, en el que no nos bañamos nunca dos veces siendo la misma persona, la vida interior de esta exposición está en constante estado de fuga. Se nos escurre. Las pocas referencias que se nos ofrecen son lejanas, desconocidas o están tan mixturadas entre sí que construyen algo nuevo, híbrido."

Texto de sala:
Yo soy un OTRO, obras de Daniel Romano en Fundación Esteban Lisa
Instrucciones de uso
Un sistema, lo único que falta es lo OTRO: usted

“Por lo demás, yo estoy destinado a perderme,
definitivamente, y sólo algún instante de mí
podrá sobrevivir en el otro”
Jorge Luis Borges, Borges y yo

Estimado espectador, le sugerimos que aborde la siguiente exposición con una predisposición a hacerla propia. Lo invitamos a ocuparse de la enorme responsabilidad de ser espectador, a hacerse cargo de ese terreno conquistado en duras batallas a medias entre ud. y el artista (un Ud. histórico, quédese tranquilo, no ese particular que sostiene este documento entre sus manos y un artista abstracto, ese que de a poco fue liberado de la necesidad de ser un genio).

Como ya sabe, desde que Marcel Duchamp firmó ese mingitorio que había comprado en un negocio de repuestos para el hogar y lo exhibió en un premio sin mayores modificaciones que haber girado su orientación habitual, pedirle al espectador que sólo mire, recorra y busque algo en lo meramente retiniano de la experiencia estética, dejó de ser una opción viable. Hoy, más que nunca, al arte contemporáneo antes que contemplación, se le pide curiosidad.
A ud. le toca participar, le toca ser parte de la obra… comprometerse con la parte “abierta”. Pero claro, tampoco estamos aquí frente a una obra interactiva; en todo caso, su participación se limitará a resolver los misterios detrás de esta exposición –aquellos en los que ud. elija poner el foco. Por eso, le proponemos tenga siempre en la punta de la lengua la siguiente pregunta ¿qué está pasando aquí?

 

Yo soy un OTRO
“Cuando creo que lo tengo, se me va”
Nelly

 

OTRO se compone de varias piezas, todas ellas apuntando en una misma dirección. Eso que queda suspendido, que toma más vuelo o se apoya con mayor firmeza en ciertas piezas, es algo bastante inasible y difícil de definir. Tal vez por eso, este texto lleva varias palabras acechando la idea sin poder atraparla. Eso que no se deja alcanzar en esta exposición es la pregunta por lo que los OTROS “nos hacen” en relación a nosotros. O, puesto de otra manera, en cómo al asumir e indagar en la existencia de un OTRO podemos reconocer nuestra identidad.

Como el río de Heráclito, en el que no nos bañamos nunca dos veces siendo la misma persona, la vida interior de esta exposición está en constante estado de fuga. Se nos escurre. Las pocas referencias que se nos ofrecen son lejanas, desconocidas o están tan mixturadas entre sí que construyen algo nuevo, híbrido. Tomemos el caso del video Somos el río, en el que vemos desfilar, en un pasaje gentil de rostro a rostro, numerosos personajes que no son nunca una sola persona. En resultado es una extrañeza de seres. Por definición, OTROS.

Lo OTRO, según la perspectiva lacaniana, puede ser vinculado también al orden simbólico y el lenguaje: de alguna manera, un límite y aquello que está en lugar de una ausencia. Este rasgo de alteridad se encuentra presente en la serie Inter-locución en la que se hace constante alusión a un tercero inexistente. Ese tercero es el vínculo, la pauta que reúne una imagen con otra. Dada la alta carga narrativa de cada imagen, nuestro lenguaje –la manera que aprendimos a aprehender el mundo– nos exige un coeficiente de sentido entre dos pares montados por yuxtaposición. Esa tarea, el artista se la deja al espectador, en una semiosis infinita nunca fija, nunca cerrada, un permanente juego.

Si lo pensamos desde la filosofía de G. Leibniz, lo OTRO representa una vigilia constante, el insomnio del sentido, lo que siempre lo mantiene más allá de cualquier intento de captura. En este caso, podemos hallarlo representado en Nosotros, una fotografía adquirida por el autor en un viaje al otro lado del mundo que conocía. Un objeto desnaturalizado de su uso inicial para adquirir una nueva función: la de ser aquello que nos recuerda acerca de la imposibilidad de comprenderlo todo, a pesar de cualquier esfuerzo por hacer entrar a cientos de personas en un mismo encuadre fotográfico.

Mariana Rodríguez Iglesias
Nuñez, Otoño 2017

 

Daniel Romano
Otro

Desde el 3 de mayo al 2 de junio de 2017
Inaugura: 3 de mayo, 19 hs
Curaduría: Mariana Rodriguez Iglesias.
Producción y Coordinación: QUINTANA / Julia Elena Baitala

Fundación Esteban Lisa
Rocamora 4555
Ciudad Autónoma de Buenos Aires